Claves para una buena convivencia entre ciclistas y automovilistas: Día Mundial de la Bicicleta

En el marco del Día Mundial de la Bicicleta establecido por la ONU, este artículo escrito por Amarilis Horta, directora ejecutiva de Bicicultura y del Programa Compartir para Convivir, entrega claves esenciales para mejorar la convivencia entre automovilistas y ciclistas, volver más segura la movilidad en ciclos y aportar a la masificación del uso vehicular de la bicicleta. A través de orientaciones prácticas dirigidas a ambos grupos, ONG Bicicultura resume 18 años de experiencia, e invita a reconocer derechos, compartir el espacio público con empatía y avanzar hacia una cultura vial más respetuosa, inclusiva y sostenible.

1. CONSEJOS PARA AUTOMOVILISTAS

Comparte la calle con empatía y respeto: Quienes se mueven en ciclos aportan a descongestionar el tránsito —ocupan apenas una décima parte del espacio de un auto—, no contaminan el aire, no generan ruido y se desplazan con energía limpia: la suya propia. Lo hacen sin carrocería ni protección, enfrentando riesgos cada día con esfuerzo y convicción. Cuídalos, respétalos, valóralos. La calle es de todos.

Ciclistas con derechos: La ley les permite circular por la calzada. No están invadiendo tu espacio: son parte legítima del tránsito.

La calle también es de los ciclistas: Salvo autopistas concesionadas, los ciclos pueden usar todas las vías. Aceptarlo mejora la convivencia.

Atento por ambos lados: Los ciclistas pueden aparecer por izquierda o derecha. La ley lo permite en múltiples situaciones. Pueden ir por la izquierda si van a girar, si hay pista solo bus o si hay obstáculos en la derecha.

No todos usan ciclovía (ni deben): Por ley, los ciclistas deben usar la calzada, salvo que exista ciclovía certificada y muy pocas lo están.

Pueden adelantar entre pistas: En cruces con semáforo, los ciclistas pueden avanzar entre autos detenidos para colocarse al frente. Así se hacen visibles y facilitan los giros del resto.

Conduce con atención plena: No manejes en “piloto automático” ni distraído con el celular. Ciclos y motos tienen dinámicas muy distintas a los autos.

Cede espacio al ciclista: Al circular por primera pista, no te cargues a la orilla, reserva una franja segura para los ciclos.

Respeta el metro y medio: Al adelantar a un ciclista, deja al menos 1,5 metros de distancia lateral. Es su espacio vital.

No invadas la ciclovía: Las ciclovías son exclusivas de ciclos. Usarlas como estacionamiento o atajo pone vidas en riesgo.

Mira antes de abrir la puerta: Evita accidentes por “dooring”, antes de abrir la puerta para bajarte del auto, revisa siempre el espejo.

Cede el paso al girar a derecha o izquierda: Si un ciclista va recto y tú vas a doblar, debes ceder el paso. Tienen derecho a seguir.

Evita tocar la bocina sin necesidad: Los bocinazos asustan a ciclistas que carecen de cabina aislante, son causa de caídas y maniobras bruscas y riesgosas.

En pasos peatonales, los ciclistas ya no deben bajarse: La ley cambió: ahora pueden cruzar montados, a baja velocidad y respetando la prioridad del peatón. Muchos automovilistas no lo saben y reaccionan con agresividad.

No confundas ciclistas con peatones: Un ciclista puede aparecer rápido en un cruce donde no viste a nadie a pie. Su velocidad es mayor: mira dos veces antes de avanzar.

Hazte visible: Usa luces y ropa reflectante, especialmente de noche o con baja visibilidad.

Circula por la derecha, pero no pegado a la cuneta: Mantén una trayectoria predecible y a distancia prudente de la orilla (basura, vidrios, grietas, rejillas de aguaslluviasy autos estacionados.

Circula por la izquierda sólo si corresponde y es muy necesario: Puedes usar la pista izquierda si vas a girar, si tu destino está a la izquierda, si hay pista solo bus o bloqueos en la derecha, pero la mayoría de automovilistas no lo sabe y algunos lo “castigan” y pueden hacerte pasar sustos y mal ratos.

Mantente en la calzada, salvo excepciones: Si no hay ciclovía certificada, debes circular por la calzada. Evita la vereda, salvo que seas mayor de 60 años o circules con niños. También puedes hacerlo excepcionalmente cuando la circulación por calzada esté impedida.

Señaliza tus maniobras: Indica con los brazos si vas a girar o cambiar de pista. Comunicar tus movimientos mejora la convivencia con los otros y previene incidentes.

Respeta las señales de tránsito: No cruces con roja, en Chile no está permitido. Aunque veas que es seguro cruzar, que para ti es más seguro y que incluso facilita la circulación de los otros, no lo hagas. Esa actitud irrita a los automovilistas y exacerba las tensiones.

Anticipa los movimientos de otros y no confíes: Observa el entorno y actúa con cautela, asumiendo que para muchos resultas invisible. Atiende a las luces de viraje, pero sin confiarte, porque no todos los automovilistas señalizan.